Por: Isabel Vargas Torres*
Al modelo neoliberal no le importa la gente, los niños, jóvenes, padres de familia y maestros; y a la orden de los empresarios, llama a que "se abra la economía”.
En este contexto, el Ministerio de Educación toma a los niños, jóvenes y maestros del sector rural como “Conejillo de Indias” al disponer el regreso progresivo a clases presenciales en la región Costa y Galápagos a partir del 15 de julio del 2020, sin tomar en cuenta que la mayoría de cantones se encuentran aún en semáforo amarillo. Esto significa que la vida y salud de la comunidad educativa es menospreciada por este régimen que solo busca el lucro y manda a la muerte a los estudiantes, maestros, trabajadores.
Mientras no se encuentre una vacuna para el Covid 19, no podemos retomar la cotidianidad que había antes de la emergencia sanitaria. Para el regreso a clases los maestros debemos tomar en cuenta los protocolos básicos recomendados por la Organización Mundial de la Salud y el COE como son: suministros de agua, jabón, desinfección de manos, ropa, calzado, mamparas, señalética para los dos metros de distancia en el interior del aula y fuera de ella, asepsia de las áreas comunes como aulas, patios, baños, manijas, barandas, los insumos de bioseguridad, infraestructura para el aforo de 20 estudiantes por aula.
Las medidas neoliberales impulsadas por el régimen, se aplican tomando como pretexto la pandemia. Recordemos algunas cifras del sector rural antes de la emergencia sanitaria: el 69,4% de las escuelas no tienen luz eléctrica; 85,2% no tienen agua potable; el 90,4% no cuentan con internet. Durante la emergencia sanitaria a 108 días, el Ministerio de Educación no resolvió el problema central de conectividad de los estudiantes de la escuela pública. El 70% de estudiantes no interactúan con los docentes. A esto se suma que en el presupuesto para educación en el rubro de infraestructura y mantenimiento le disminuyen $ 348´471.147,10. Sin embargo, el régimen pre pagó USS 2.300 millones y en plena cuarentena canceló USD 325 millones de la deuda externa. Por otro lado, la corrupción avanza y el SRI aún no recauda los $ 1.500 millones que le deben las grandes empresas; esto perjudica a los ecuatorianos de los sectores populares y muestra el carácter de este gobierno, servilismo al imperio y a los grupos económicos de poder; pero inhumano con los niños, jóvenes y con el pueblo. En síntesis, para ellos: el capital esta sobre el ser humano.
Sin las estrictas medidas de seguridad, las clases presenciales, tanto estudiantes como maestros, corren el riesgo de adquirir el Covid 19, dengue o zika; se pone en riesgo la vida y la salud de quienes se supone tienen la prioridad de sus derechos como es el desarrollo integral que le corresponde al Estado, la sociedad y la familia promover para que prevalezca el interés superior del niño y la adolescente.
Las propuestas pedagógicas, sociales y de financiamiento han sido entregadas por parte de la UNE y otras organizaciones sociales; sin embargo, no han sido recogidas por el ejecutivo. El siguiente paso es lo que ya está escrito en los anales de la historia, la organización es el camino de victorias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario